FUNCIONAL REHABILITACIÓN DE UNA COCINA Y BAÑO EN RIPOLLET

Os traemos un proyecto en el que se ha llevado a cabo la rehabilitación integral de una cocina y de un cuarto de baño bajo un criterio estético uniforme, convirtiéndolas en dos modernas y atractivas estancias, funcionalmente prácticas y accesibles. La gama cromática concisa, elegante y natural permite un juego de contrastes -más acusado en la cocina- que aporta un agradable toque en ambos ambientes, alejándolos de una posible monotonía.

Originalmente, las reducidas dimensiones de la cocina no permitían que el usuario pudiera resolver todas sus necesidades ni disponer de todos los elementos que incluye una cocina bien equipada. Para solventar estas carencias, la planta de forma rectangular se amplió con la incorporación de una parte del lavadero, modificando el espacio en forma de L.

Para realizar este cambio, se desplazaron la caldera, la lavadora y la secadora, y se hizo un cerramiento para separarlas de la cocina. Además, se instaló un herraje de la marca Krona para poder poner la puerta encastrada en la pared y ganar 1 m2.

Un mobiliario de líneas completamente rectas, tiradores tipo gola y electrodomésticos integrados (nevera y lavavajillas) ofrecen un espacio completamente ordenado y visualmente despejado. El aumentar la superficie también ha permitido incluir una semi-columna para el horno-microondas y una mesa de nogal americano donde desayunar o tomar un pequeño aperitivo mientras se cocina.

En el baño, la entrada también se ha modificado a nivel estructural con la incorporación de una puerta encastrada Krona. Para hacer que el espacio resulte más ligero se han elegido sanitarios blancos y mobiliario suspendido que, por otra parte, también facilita la limpieza. La cerámica del interior de la bañera forma un decorativo damero que genera un contraste con el resto de la cerámica. El pavimento sube también por detrás de los sanitarios para revestir el cajón donde se oculta la cisterna del inodoro y que también ejerce de práctica repisa.